Tras unos mil kilómetros cruzando el desierto de Atacama, dejamos atrás la zona más árida del planeta. El color verde empieza a salpicar, tímidamente, el paisaje. pero los tonos amarillos y marrones siguen dominando.
Llegamos al valle del Elqui, donde los viñedos han ido ganando terreno a las montañas con un objetivo: la producción del pisco, una bebida destilada cuyo origen se disputan entre Chile y Perú.
En el tranquilo pueblecito de Vicuña visitamos las instalaciones de Capel, la mayor cooperativa productora de Pisco en Chile, donde disfrutamos de una visita guiada y una degustación de este destilado tan común en el país.